Chile. Este lunes 14 de noviembre en el auditorio Salvador Allende de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano de Santiago, se realizó un encuentro y conversatorio denominado: “Guardianas del Agua, saberes ancestrales Mbya Guaraní”.
La presentación fue realizada en idioma guaraní y español, con la participación de la líder espiritual y médica Mbya Jaryi Jasuka, mujer indígena de 100 años de edad, y Sara Benítez.
Las participantes relataron en el conversatorio la situación actual de su pueblo ubicado en Paraguay, cómo se ha perdido la espiritualidad y protección de la naturaleza a nivel global debido a las decisiones del ser humano en relación a su entorno y al mundo en que habitan, producto del consumo. Estos temas fueron uno de los puntos más relevantes del conversatorio.
Agua, vida y conciencia
Los saberes de este pueblo comparten una profunda protección hacia el agua y la tierra, es por esto que el encuentro comenzó a partir de una serie de fotografías de niños y niñas de ese pueblo sobre la relación de su cotidiano vivir con el agua. En ese contexto explicaron sobre la danza para el agua, cuyo objetivo es recobrar la vida y sus cursos.
Según relata la historia Guaraní, el universo y agua son dos elementos inseparables, la energía que nos mueve es el agua, nacimos agua, somos agua y volveremos a este estado, por lo tanto es necesario y fundamental su cuidado.
Otros elementos importantes son los árboles, (a los que denominan hermanos mayores), la reciprocidad y la comprensión del otro como un/a hermano/a (a través del ejercicio del espejo) que da cuenta del llamado cóncavo y convexo de sus relaciones, basadas en la equidad.
La comunidad Guaraní durante estos últimos años ha tenido que lidiar con vulneraciones graves al derecho de existir y coexistir en sus comunidades, principalmente porque el agua, elemento fundamental, está en peligro.
Sara Benítez expresó que los conflictos medioambientales están relacionados al consumo: “el consumo de soya es una demanda para el mundo y hay multinacionales que se encuentran en el territorio expropiando tierras para uso extensivo de plantaciones de soya”.
Después de largos procesos de resistencia ante intentos de colonización en todos los aspectos de sus vidas, los Mbya han tomado posicionamiento político frente a sus problemas debido a las extensas plantaciones de soya y expropiaciones de sus tierras para la producción por parte de empresas multinacionales.
Esta es uno de los Pueblos que enfrenta procesos de lucha para disminuir los impactos en la naturaleza. Para ello, dos estrategias han sido la reforestación de árboles y la protección de acuíferos.
Por su parte, Sara Benítez en conjunto con Jaryi Jasuka, expresaron la necesidad de reeducar, desaprender y descolonizar a la humanidad:“Reeducar la conciencia para disminuir la capacidad de consumo” para las nuevas generaciones, niños y niñas.
Durante la exposición nacieron dudas y cuestionamientos sobre realidades Latinoamericanas, un ejemplo de ello, fueron casos similares ocurridos en Colombia y en Chile con la instalación de empresas extractivistas en territorios o comunidades Mapuche y en conflictos socioambientales por luchas por la conservación del agua en todo el país.
Para finalizar, la anciana guaraní Jaryi Jasuka, entregó un mensaje a las nuevas generaciones sobre cómo ir recobrando y educando desde el vínculo materno, para que los niños y niñas, sean seres consientes, es así como instó a los partos naturales.
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Por Catalina Manque, Colectivo Mapuexpress
