La Historia del Despojo: El origen de la propiedad particular en el territorio mapuche” (escogida como mejor libro del año 2021 por la Asociación de Librerías Independientes de Chile) del historiador Martín Correa Cabrera fue presentado el pasado viernes 30 de junio en la sede Chiloé de la Universidad de Los Lagos.
La actividad contó con la participación de Docentes, Alumnos(as) en formación de distintas carreras y público externo a la universidad y fue organizada por la Dirección de Pueblos Originarios, en el marco del ciclo de Seminarios sobre la Historia y Memoria Mapuche Williche de Chiloé.
En ese contexto, la Directora de la Dirección de Pueblos Originarios Silvia Castillo Sánchez apuntó a que la presentación de esta investigación “responde a una propuesta por parte de la Universidad de Los Lagos a través de su Dirección de Pueblos Originarios, en la línea de contribuir con un enfoque intercultural crítico respecto del trabajo con naciones originarias. Aportando con ello en ofrecer otros ángulos para la construcción de conocimientos y así ampliar la perspectiva de los y las estudiantes como profesionales en formación”.
Respecto al desarrollo del laureado libro, Martín Correa Cabrera Historiador (PUC) y Doctor en Antropología (UC del Norte) introdujo la presentación señalando que dicha publicación “es resultado de años de investigaciones sobre como han sido despojadas las familias mapuche de los territorios ancestrales de Arauco, Alto Biobío, Malleco, Cautín, Osorno, Valdivia y Chiloé”.
“El libro tiene mucha fuente oral y documental, mucha memoria que coinciden notablemente con los documentos relativos a registros de propiedad en Conservador de Bienes Raíces, la hijuelación, remate y adjudicación de tierras mapuche a colonos”, dio a conocer Martín Correa.
DISPARADOR
Refiriéndose al disparador que motivó la realización del compendio, Correa indicó que “cada cierto tiempo diversas encuestas aseguran que sobre el 78% de la población capitalina reconoce que las tierras que son fuente de conflicto entre el Estado, particulares y comunidades mapuche, pertenecen a los mapuche y que estos han sido despojados de sus tierras”.
A partir de dicha percepción ciudadana “surgió la intuición y la necesidad de contar y transformar en dato duro, cómo se habían usurpado las tierras. El libro está pensado para que la sociedad mapuche y la sociedad chilena en su conjunto puedan saber y enterarse que lo que pasó con el territorio mapuche en Arauco, Malleco, Cautín, San Juan de la Costa y Chiloé fue muy parecido”.
Sobre como se llevó a cabo la usurpación del territorio mapuche, Correa señala que “se llevó a cabo por parte de un ejército de ocupación que avanzó en líneas de frontera (fuertes) para subdividir el territorio mapuche y después entregar las tierras a colonos extranjeros, por tanto, el origen del territorio mapuche es violento y estuvo plagado de abusos y vejaciones contra las familias mapuche”, recalcó.
La investigación da cuenta de las formas de despojo territorial mapuche y creación de la propiedad privada desde las regiones del Biobío hasta la Isla de Chiloé, donde la memoria resulta fundamental para aquellas comunidades que fueron reducidas y se encuentran en procesos de restitución territorial.
LA MEMORIA
En el libro redactado por Martín Correa, la memoria aparece como un elemento fundamental, pero “no cómo un recuerdo, sino como una memoria que se va construyendo y se va viviendo. La memoria de algunas comunidades como Temucuicui por ejemplo, no termina sino que continua con el asesinato de Camilo Catrillanca y con los allanamientos de ahora y se va comentando, son las conversaciones que se desarrollan al interior de la rucas y forman parte de la identidad medular de cada lof”, indicó.
Agregando que “La memoria es un elemento constructivo permanente que se va alimentando y se va construyendo, porque los hechos horrendos de la mal llamada pacificación de la Araucanía ocurrieron hace 130-150 año y eso son tres generaciones de abuelos, la tradición oral mapuche se transmite de abuelo a nieto. Es decir, estos hechos son ayer para un pueblo con memoria”.
Asimismo, el despojo territorial contra los mapuche pone en el centro la discusión aspectos relacionados con la legalidad y la legitimidad, “las empresas forestales pueden mostrar títulos de propiedad, los cuales pueden ser legales, pero no legítimos, tal cómo ha sido posible apreciar en distintos momentos de la historia. El Apartheid fue legal, los hechos de la dictadura fueron legales, pero no legítimos”, ejemplificó el autor.
EDUCACIÓN
Refiriéndose a la importancia de la educación vinculada a procesos de memoria comunitaria, Silvia Castillo Sánchez, Directora de la Dirección de Pueblos Originarios, indicó que desde la perspectiva del ejercicio de los derechos y erradicación de prejuicios y practicas racistas sobre los pueblos indígenas y otros grupos subalternos “resulta importante avanzar hacia mayor justicia social» (…) «Me alegró muchísimo que los profesionales en formación y personas que imparten clases pueden incorporar esta historia no contada a los procesos de formación, puesto que somos producto de cómo hemos sido formados(as) desde nuestra escuela, desde nuestras familias lo cual nos ha configurado a partir del despojo desde una estructura monocultural y monolingüe. Creemos que la educación es una oportunidad para pensar proyectos de intervención de futuro basado en derechos colectivos”.
Por su parte, Martín Correa agregó que “el espacio educacional es fundamental y si se están preparando más personas, resulta posible seguir contribuyendo a recuperar la memoria que existe en las comunidades, porque la memoria también sirve para restituir derechos cómo hemos podido apreciar en diversos procesos de reclamación de tierras mapuche donde la memoria oral ha sido importantísima para justificar y acreditar la demanda”.
Al finalizar se realizó una jornada con docentes de las carreras de Técnico en Educación de Párvulos y Pedagogía General Básica para didactizar el contenido del mencionado libro y utilizarlo para la formación de futuros docentes.