27/09/2019
Por Txokiñke lof ñi txawün, Temuko waria mew, epu warangka mari aylla konpachi txipantü mew/ Txawün de comunidades de Temuko año 2019.
Mucho del debate público sobre Temuko está pensado en la zona urbana, el antiguo mercado, la feria, la estación, el estadio, las universidades, emblemáticos liceos, poblaciones y el Gelol winkul entre otros. Sin embargo, en la comuna de Temuko hay muchas más historias, y sobre todo, más de 100 comunidades mapuche, muchas de las cuales ya fueron erradicadas por la construcción de poblaciones y villas en un contexto de vorágine inmobiliaria. En ese trama inmobiliario –hoy- hay un menoko en riesgo de ser destruido por un proyecto inmobiliario de 382 casas y 120 departamentos del denominado “Loteo Labranza”, el cual se pretende instalar en el territorio mapuche de Botrolwe. Por ello, las comunidades autoconvocadas en Temuko pu lof ñi txawün/Txawün de comunidades de Temuko ha decidido iniciar un proceso de defensa del menoko -hoy en manos de la empresa Pocuro- solidarizando con la comunidad afectada y el territorio Botrolwe, frente al avance inmobiliario que tiene amenazadas a muchas otras comunidades más.
Contexto territorial de Botrolwe, un lof mapu ancestral
El lof mapu Botrolwe es un territorio mapuche ancestral, el cual debe su nombre al estero que permitió el desarrollo de la vida en el lugar. Botrolwe o Fitrunwe en Mapuzugun, hace referencia a un lugar que humea, tal como señalan los relatos antiguos que dicen que el nombre hace referencia a la enorme neblina que se levanta producto de la humedad y que parece un denso humo. Este territorio es un humedal y un santuario de especies de flora y fauna endémica asociada a este tipo de terrenos, tales como Temu, Kollimamül, Pitra, Koyam, Lin, rüme, Foki, pero también diversas especies de patos silvestres, tawa, rakiñ, rawiñma, pideñ, garzas, wairao, peuko, lloika, traro, tiwke, trewül e incluso cisnes de cuello negro, y otros como koipo, sapitos de distintas especies, lagartos y camarones entre muchos otros más.
En el lof mapu Botrolwe, habitan genmapu o dueños espirituales que viven en los menoko, mawizantu y witrunko que atraviesan esta tierra, desde los cerros de Temuko hacia el río Cautín. Por lo mismo, hay mucho lawen o plantas medicinales usadas ancestralmente por las familias locales. Esta ancestralidad, se corroboró por accidente el año 2007 cuando hubo un hallazgo arqueológico que se realizó -en una obra- de la Villa José Muñoz Concha-1 (Villa JMC-1) de Labranza. Allí, según relata el Museo Regional de la Araucanía, quedó al descubierto la presencia de un cementerio y asentamiento de comunidades de 1000 años de antigüedad. En el lugar se encontraron artefactos textiles, greda, joyería y restos humanos que están en dependencia del museo (Museo Regional de la Araucanía, 2015).
Para ubicarnos geográficamente, este territorio está –hoy- asentado entre la avenida Luis Durand y el sector norte de Labranza (Complejo Deportivo) en la comuna de Temuko. En la actualidad, en el lof mapu Botrolwe -incluido Trañi Trañi- están las comunidades Antonio Coline, Juan Painenao, Juan Huaiquinao, Guenchulle Linconao, Juan Collinao, Juan Cayupan, Antonio Mariman, Juan Antinao y Domingo Marinao, las que componen un importante cordón humano unido ancestralmente a través de relaciones de parentesco. Antes de ser anexadas -al Estado chileno- estas comunidades y otras vecinas como Kowilwe/Lirkai hacían plena ocupación de los valles y vegas que se forman en este espacio y que eran conectadas por el camino denominado “Botrolhue S-280”, el cual hoy se encuentra cerrado por distintos loteos asentados en el lugar. Estos condominios, barrios y villas se constituyeron tras erradicarse al menos 5 comunidades del territorio y desafectarse tierra mapuche previo a la entrada en vigencia de la Ley Indígena 19.253, algunas de esas comunidades son Agustín Mariman, María Huenchuman, Miguel Huenulaf, Juan Bautista Nahuelpan y Juan Cariqueo.
La amenaza inmobiliaria
En la actualidad, ninguna de las comunidades colinda con el estero Botrolwe ya que tras la radicación se les quitó los terrenos aledaños al estero y allí se instalaron fundos. Estos terrenos “desafectados” -hoy en día- están a disposición del avance inmobiliario urbano de Temuko-Labranza, ya que pasaron a ser urbanos con el nuevo Plan Regulador comunal del 2016. Tras este Plan Regulador, algunas de las comunidades del lof mapu Botrolwe quedaron en el limite urbano/rural de la comuna de Temuko y otras dentro del radio urbano, lo cual ha provocado la masiva venta de terrenos e instalación de villas, condominios, parcelas y departamentos.
Debido a este avance inmobiliario, han surgido conflictos ambientales derivados en micro vertederos, abandono de mascotas, rellenos ilegales de humedales, movimiento de afluentes de agua, desechos domiciliarios a los esteros, robos de animales y casas entre otros, los que han alterado la vida de los botrolweche de manera negativa. De igual modo, la urbanización de parte del territorio ha provocado el desplazamiento de algunas de las familias locales y el cierre de caminos. Y, es precisamente esta afectación la que hoy tiene bajo amenaza de muerte a un importante menoko que está dentro del territorio y que debe ser protegido y resguardado considerando la afectación futura que puede haber hacia el agua y a la economía local de cientos de productores hortícolas, frutícolas, aviarios, apícolas y pequeños ganaderos de las comunidades mapuche del sector.
Las modificaciones en el plan regulador comunal y la toma de decisiones sin la participación de las comunidades está generando efectos negativos hacia un grupo humano determinado. En razón a esa situación, la comunidad mapuche Juan Painenao, del lof mapu Botrolwe, entregó en mayo del 2019 una carta haciendo ver la futura afectación ambiental y cultural que habrá hacia un menoko ubicado dentro del titulo de merced de la comunidad, pero que a través de las ventas irregulares que se hicieron hace años termino en manos de la empresa Pocuro y distante a unos 400 metros del denominado “Loteo Labranza”. El proyecto que amenaza al territorio consiste en la construcción y habilitación de 382 casas y 120 departamentos distribuidos en 6 edificios de 5 pisos cada uno y que serían instalados en terrenos que están dentro del titulo de merced de la comunidad Juan Painenao.
La comunidad Painenao, mediante ordinario N° 726 de fecha 18 de diciembre de 2018, observó que la empresa de Sr. Luis Andrés Sáez Thielemann omitió la existencia de la comunidad indígena Juan Painenao y Antonio Coline aun cuando el proyecto se pretende instalar sobre las tierras que le reconoce el titulo de merced. Por ello, la comunidad pidió que se revise el proyecto por la futura afectación que puede tener sobre el territorio. Acto seguido, el 3 de enero de 2019, el SEA remite al titular, del proyecto el informe consolidado de observaciones, donde en atención a reuniones de trabajos asociadas a población protegida, se manifiestan las siguientes preocupaciones asociadas a la comunidad:
Aclarar posible afectación de las emisiones de ruido sobre la tranquilidad del sector, para lo cual se requiere detallar forma de cumplimiento del proyecto para receptores más cercanos y correspondientes a las comunidades mapuches presentes en el sector
Aclarar los efectos que el proyecto podría producir con las condiciones de seguridad, tránsito y generación de micro basurales o depósitos de escombros.
Aclarar la relación del proyecto, con los niveles de aguas subterráneas que existen en el sector y si existe posibilidad de contaminación de estas. Además, se solicita no considerar como posibilidad la extracción de aguas desde el menoko que presenta la comunidad.
Luego, la empresa declara en adenda del 12 de febrero de 2019, lo siguiente:
“Es necesario aclarar que no existe claridad por parte de los entrevistados de la exactitud de los límites territoriales y prediales para la definición de los territorios que pertenecen a las comunidades.”
Dicha información, no es verídica, pues en el mapa adjunto exponemos que existe basta información que los títulos de merced de las comunidades Antonio Colines y Juan Painenao limitan con el proyecto inmobiliario.
Las comunidades del territorio Botrolwe se sienten pasadas a llevar por la vorágine de la expansión urbana no planificada ni participativa, para el territorio el tema inmobiliario se ha transformado en una “segunda pacificación de la Araucanía”. Por ello, con fecha 28 de marzo del 2019, la comunidad Antonio Coline hizo saber su preocupación al SEA por la instalación de tamaño proyecto que representa una amenaza para la continuidad de las prácticas culturales mapuche:
Con fecha 20 de mayo del 2019, la Comisión de Evaluación de la Araucanía, presidida por el Intendente y donde participan diversos Seremis de gobierno, sesionó favorable a aprobar el proyecto de Loteo Labranza. Ante la eminente preocupación de las comunidades, la Comisión de Evaluación le respondió a la comunidad Painenao y a la Coline que el terreno donde se emplaza el proyecto no es indígena, que no habría afectación al menoko, que no se contaminarían las napas de agua y que no se utilizarán los caminos de las comunidades. Además, indicaron que no había presencia de cementerios mapuche o hallazgos arqueológicos, situación que se contradice con el emplazamiento de la Villa JMC-1 descubierto el 2007 en el mismo territorio.
En el acta de la comisión se señala que diferentes órganos del Estado se han manifestado favorables al proyecto, que no hay reparos ni desde lo ambiental, ni desde la Ley Indígena 19.253. Entre las instituciones del Estado está la Conadi, quien también da su favor al proyecto, aun cuando el terreno en cuestión está entre dos Títulos de Merced y rodeado por muchas otras comunidades. Esto sería una grave falta a la protección de las tierras indígenas, asunto estipulado en la Ley Indígena 19.253, en los artículos º12 y º13, en donde se reconoce que aún cuando en otras manos, las tierras indígenas no pierden su condición de tal.
Conclusiones
El reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas es fundamental para avanzar hacia un Estado moderno y democrático. Chile, es un país miembro de la Comisión para la Eliminación de la Discriminación Racial CERD (Aylwin, 2009, p.5), y existen instrumentos internacionales de derechos humanos que están ratificados por el Estado que entregan medidas, orientación y recomendaciones para que los gobiernos puedan seguir. Entre ellos, el reconocimiento de los derechos políticos de los pueblos indígenas, lo cual presupone una buena disposición para ajustar el ordenamiento político-jurídico del Estado y resguardar los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas.
El pueblo mapuche tiene sus propias formas y autoridades, y sus territorios están protegidos por la Ley Indígena 19.253. Además, el Derecho Internacional a generado mecanismos para resolver estas materias de derechos, por tanto es deber del Estado proporcionar los canales de comunicación necesarios entre los privados y las comunidades. Pero lo que no puede suceder, es que se vulneren los derechos de los pueblos indígenas, quienes son los primeros que deben decidir sobre el futuro de sus territorios de manera libre.
El terreno donde se pretende instalar el mega proyecto inmobiliario “Loteo Labranza” es parte del titulo de merced de la comunidad Juan Painenao, tal proyecto se encuentra ubicado a una distante a 400 metros del menoko, por lo anterior , hay una real afectación al territorio. Esto requiere de mitigaciones importantes y estudios serios sobre la afectación cultural y ambiental al territorio Botrolwe y sus comunidades ya que estamos hablando de más de 500 viviendas. Así mismo, el menoko es un espacio sagrado para el pueblo mapuche, el cual no debe ser alterado ni afectado de ninguna manera, más aun con todos los problemas hídricos que se presentan en la actualidad.
Por todo lo mencionado, las comunidades del lof mapu Botrolwe han decido defender el menoko. Además, esta situación ha sido respaldada de forma unánime por todas las comunidades mapuche y territorios autoconvocados en el Txawün de comunidades de Temuko, el mismo que rechazó la consulta por la modificación de los artículos números º12 y º13 de la Ley Indígena en el 2019, por considerar que es un traje a la medida de la vorágine inmobiliaria en la comuna de Temuko. Hoy, la defensa el menoko es defender la vida y a las comunidades de este territorio ancestral, por tanto el llamado es a tomar conciencia en favor de las próximas generaciones.
Contacto:
Jobet Coliqueo, presidenta de la comunidad Juan Painenao +56 9 94943536