Un histórico Chravuun (1) (encuentro, cruzarse en el camino) rico en simbolismos propios de la cultura mapuche se realizó durante 4 días con el objetivo de debatir y consensuar las ideas que orientarán la estrategia del pueblo indígena en su lucha por la recuperación y el control de las tierras usurpadas.
Esta vez el Chravuun se realizó en un sitio de gran significación cultural para este pueblo originario: el Fuerte Chiguaihue, ubicado a orillas del río Malleco (sector bajo Malleco) en la Región de La Araucanía. Este lugar es relevante para la memoria histórica mapuche, porque allí Cornelio Saavedra instaló, durante la Ocupación Militar de la Araucanía (1870), el primer fuerte de la frontera del Malleco. “Aquí mataron a miles de mapuches, debajo de estas tierras hay mucha sangre mapuche, pero hemos vuelto, estamos contentos y aquí vamos a estar para siempre”, recordaba un joven Francisco Levipan.
Según Ana LLao, quien también asistió al encuentro, los que participaron serán los encargados de “liberarnos del colonialismo chileno y el neoliberalismo salvaje que nos roba y explota los recursos naturales”.
Dentro de las principales conclusiones que dieron a conocer está la “decisión de hacer público el rechazo a las nuevas políticas represivas y estrategias de deslegitimación implementadas por el Estado chileno en respuesta a nuestras demandas”.
Además criticaron el “aumento, mejora en la implementación de equipos a la base militar Pidima, en la última visita del Ministro del interior Jorge Burgos a la región, donde hizo entrega de carros de guerra blindados de última generación, los que serán utilizados para incursionar y continuar el hostigamiento a las comunidades movilizadas”.
Como ya mencionamos, este encuentro de alta significación cultural se realizó bajo protocolos culturales, espirituales y políticos ancestrales del pueblo mapuche, “lo que realza el fortalecimiento de los procesos de recuperación y defensa del territorio Mapuche”, explican desde la organización.
El Chravuun se inició con un Nguillatún , una ceremonia ancestral en la que participa toda la cosmovisión del pueblo mapuche (vivos, muertos, fuerzas espirituales) para rogar y agradecer por la prosperidad, el bienestar, tanto material como el espiritual, del pueblo mapuche.
Por M.S.
El Ciudadano
1 Esteban Erize (1960). Diccionario Comentado Mapuche Español. Buenos Aires.