A nuestras compañeras y compañeros,
A la comunidad universitaria,
Los últimos meses han estado marcados por la capacidad de organización, unidad y la disposición que como estudiantes hemos tenido a la hora de luchar en contra de autoridades que manejan una universidad autoritaria, que hostiga a quienes piensan distinto, que pone trabas económicas a nuestras familias, que trata a sus trabajadoras/es como peones provocando divisiones y violencia dentro de la comunidad universitaria, amenazando a quien no se ponga de su lado, y que vergonzosamente luego no es capaz de tenerles siquiera un lugar digno para poder almorzar.
La lucha que dimos y el proceso de cambios que hemos instalado y que debemos profundizar, es por una universidad democrática, que se ponga al servicio de nuestra región, de nuestras familias, que no discrimine, que no tenga barreras socioeconómicas, entre otros, todos estos pilares básicos de una Universidad Estatal.
Sin embargo hoy, como respuesta a estas justas demandas de la comunidad universitaria, a petición del Gobierno Universitario, se inicia un proceso de investigación sumaria y se pretende sancionar a estudiantes, especialmente a dirigentes de distintas carreras, miembros de la FeUFRO, y a todas/os los miembros del Centro de Estudiantes de la Facultad de Medicina, mostrando nuevamente un actuar repudiable por parte de las autoridades de la Universidad de La Frontera, pretendiendo de esta manera además, individualizar un acto que fue colectivo, democrático y que marcó un hito para el nacimiento de una Nueva Universidad, criminalizando un proceso del que tanto la comunidad de Temuco, nuestras madres y padres, nuestros académicas/os y funcionarios, y estudiantes a través de nuestras carreras fueron motores.
Con hecho gravísimo aquellos representantes de esa vieja UFRO, tratan de impedir nuestro derecho a organizarnos y manifestarnos, y además atentan contra nuestros Centros de Estudiantes, es decir, quienes nos representan y que validamos en procesos participativos y democráticos, en contraste con las autoridades universitarias unipersonales y los miembros de los distintos órganos colegiados, los cuales son elegidos por una porción privilegiada, poco y nada representativa de la Universidad y que con estos actos muestran su autoritarismo y miedo a perder aquel poder que ostentan hace ya más de una década.
Por otra parte, el proceso de investigaciones sumarias se ha hecho de manera totalmente irregular, desde un comienzo hasta la fecha, sin respetar plazos y procedimientos establecidos en el propio Reglamento de Convivencia Estudiantil.
Rechazamos el proceder de un Gobierno Universitario que ha demostrado ser incapaz de solucionar problemáticas a ya más de 13 años de ejercicio en el poder, que sólo busca dividir a la comunidad universitaria con métodos de inteligencia dignos de la Dictadura, que cuando encuentra la oportunidad desconoce acuerdos con sus estamentos y que además se niega a sentarse a dialogar, lo que se demuestra en solicitudes de reunión desde hace varias semanas y que hasta la fecha el Rector nuevamente se niega a asistir.
Frente a esto, reafirmamos nuestra disposición de avanzar en aquellos puntos que tienen relación a necesidades y demandas de la comunidad universitaria y que además seguiremos alerta ante cualquier interpretación arbitraria que se trate de dar a alguno de los puntos del acuerdo firmado en Agosto de este año.
Por último, recalcamos que defenderemos con fuerza el proceso que hemos iniciado, y que no permitiremos que se pretenda sancionar, expulsar y/o amedrentar a estudiantes, funcionarias/os y académicas/os que de manera honesta acudieron al llamado de toda la comunidad regional de construir una nueva UFRO, una que se disponga como agente dinamizador de la transformación de la Sociedad, una UFRO al servicio de nuestros Pueblos.
