La Asamblea Constituyente de Nepal pretende adoptar una nueva Constitución a mediados de agosto, pero enfrenta la oposición de amplios sectores sociales del país.
Fuente: servindi.org
Tras un año de estancamiento en las discusiones, en junio los principales partidos políticos firmaron un acuerdo de 16 puntos que allanó el camino a la redacción de la nueva ley fundamental.
Sin embargo varios sectores sociales, incluyendo a los pueblos indígenas, cuestionan el proyecto preparado por los partidos mayoritarios (que representan el 90 por ciento del Parlamento) porque aseguran que no responde a dos cuestiones determinantes: identidad e inclusión.
A continuación traducimos al español un artículo de Min Raj Chaudhary publicado en IndigenousVoice.com, medio electrónico dedicado a la realidad de los pueblos indígenas de Nepal.
Preocupaciones de los pueblos indígenas ante la nueva Constitución
Por Min Raj Chaudhary /Traducido al español por Luis Manuel Claps
El primer borrador de la nueva Constitución de Nepal fue una decepción para los pueblos indígenas. En la actualidad, sus organizaciones preparan una renovada movilización para presionar a los principales partidos políticos, corregir el proyecto constitucional e incorporar sus aspiraciones.
Pero los pueblos indígenas están divididos en dos sectores. El primero ve el proyecto como un logro parcial y muestra voluntad por trabajar en él. El segundo está totalmente en contra y rechaza de plano la decisión adoptada por la Asamblea Constituyente.
El pueblo de Nepal está cansado de esperar la nueva Constitución. Pero eso no quiere decir que esté dispuesto a aceptar imposiciones. Ellos necesitan una Constitución progresista que incorpore sus aspiraciones socio-políticas largamente postergadas.
Pero el nuevo proyecto incluye varias disposiciones que van en contra de los intereses de los pueblos indígenas.
Además, el proceso adoptado por los principales partidos políticos para aprobar la nueva Constitución ha sido cuestionable.
La Constitución se ha redactado sobre la base de un acuerdo de 16 puntos, que fue rechazado por el Tribunal Supremo. Pero los partidos firmantes desafiaron la decisión y continuaron con el proyecto, lo cual es interpretado como una traición al pueblo nepalí.
El borrador no solo ha violado la Constitución Provisional-2007, sino que además ignora los avances del movimiento social Jan Andolan, el movimiento tharuhat, las movilizaciones de los pueblos indígenas, el levantamiento de Madhes y las protestas madhesi y dalit.
El capítulo 138 (1) (A) de la Constitución Provisional-2007 garantizaba una nueva constitución con los nombres y las fronteras de las provincias federales. Pero los principales partidos dejaron en suspenso las cuestiones de denominación y demarcación de las provincias federales.
El proyecto de Constitución no asegura que las provincias federales reflejarán la identidad de los madhesi, pueblos indígenas y comunidades tradicionales.
El proyecto burla varios tratados internacionales de los que Nepal es signatario, como la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial, el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
Se otorgan más derechos a los órganos federales del gobierno y menos derechos a las provincias. Por lo tanto, hace suponer que bajo esta Constitución las provincias federales no serán fuertes.
La disposición que requiere una mayoría de dos tercios para aprobar los nombres y límites de las provincias federales es una jugada que pretende sabotear el federalismo.
Reclamos indígenas
1) Artículo 9: la vaca nuevamente sería el animal sagrado de Nepal. Como animal que sirve de alimento a los musulmanes y algunas comunidades indígenas, no debería ser el animal nacional. Podría afectar la armonía social. Por lo tanto, el rinoceronte debería ser el animal nacional de Nepal.
2) Artículo 26: los pueblos indígenas que hablan sus propias lenguas maternas deberían tener el derecho a estar informados sobre las cuestiones legales que los involucran.
3) Artículo 30: los derechos de los pueblos indígenas sobre los territorios y recursos naturales que han utilizado tradicionalmente deben ser reconocidos por la nueva Constitución.
4) Artículo 32: los pueblos indígenas deben tener acceso a información sobre cuestiones de interés público que los afecten traducida a su lengua materna.
5) Artículo 35: debe reconocer el derecho de los pueblos indígenas a conservar la diversidad biológica.
6) Artículo 36: asegurar las leyes y recursos para ejecutar instituciones educativas en lengua materna a las diversas comunidades étnicas.
7) Artículo 38: deben reservarse cargos para personas indígenas en proporción a la población de los pueblos para todos los organismos de gobierno federal y provincial.
8) Derecho a la autodeterminación: la nueva Constitución debe garantizar el derecho a la autodeterminación de los pueblos indígenas.
9) Derechos preexistentes: los pueblos indígenas ejercen derechos preexistentes sobre los recursos naturales que han utilizado tradicionalmente.
10) Derecho a la justicia social: las comunidades tradicionales de Kamaiya, Kamlari, Haliya y otras deberían ser prioridad en las estrategias de desarrollo.
11) Justicia tradicional: varias comunidades indígenas de Nepal vienen ejerciendo sus sistemas de justicia tradicional. La comunidad étnica de los Tharu es un ejemplo al respecto. La nueva Constitución debería reconocer estos sistemas.
12) Artículo 213: los jefes de las organizaciones indígenas tradicionales deberían integran los consejos municipales.
13) Artículo 255: además de la Comisión Nacional de Inclusión, deberían conformarse al menos una Comisión Tharus y una Comisión de Pueblos Indígenas.
El proyecto de Constitución ha saboteado derechos preexistentes de los pueblos indígenas, su derecho a la libre determinación, autogobierno e identidad colectiva.
Según Indigenous Voice, diversas organizaciones demandaron que el gobierno haga traducir el borrador de constitución a los diferentes idiomas locales, para recibir la opinión de las comunidades que no comprenden el nepalés.