Se dice, que la ciudadanía elige a sus representantes en el parlamento para que represente los intereses colectivos, sin embargo, el duopolio, desde los sectores de la ultra derecha chilena hasta sectores seudo socialistas acomodados en el neoliberalismo, han dejado de manifiesto “el arte de negociar” con los sectores empresariales chilenos que basan sus actividades en el extractivismo para el lucro.
Imagen: Senador Rossi (El dinamo)
Uno de los últimos casos que detonó luego del caso Penta y nueragate, fue el que involucra a los intereses de la Sociedad Química y Minera de Chile (SQM), que se dedica a la explotación, procesamiento y comercialización del salitre, yodo, potasio y litio en Chile.
Esta empresa, según investigaciones que se están llevando, ha realizado pagos a diversos actores políticos del duopolio (Nueva Mayoría y Alianza), donde aparecen varios miembros del comando presidencial de segunda vuelta de Sebastián Piñera, asesores de Fulvio Rossi (PS), y también Jaime Orpis (UDI) y Juan Antonio Coloma (UDI), varios militantes DC y un hijo de Pablo Longueira. También la lista revela el pago de la empresa de Ponce Lerou a gobernadores, intendentes y autoridades del Gobierno de Piñera, según publicaciones del diario El Mostrador. / http://www.elmostrador.cl/pais/2015/02/23/sqm-suma-y-sigue-escritor-rivera-letelier-hijo-de-longueira-y-mas-de-30-nombres-vinculados-a-la-politica-le-boletearon-en-2010/
El diputado Hugo Gutiérrez viene sosteniendo a viva voz que el senador Rossi ha recibido financiamiento de empresas mineras “parece que ya todos adivinaron quién es el parlamentario del norte financiado x mineras SQM, Collahuasi, Los Pelambres-Luksic!!!», señaló a través de las redes sociales.
Más allá de estos casos que involucra a asesores del senador Rossi, su ONG y financiamientos en periodos de campañas electorales, llama la atención los comportamientos que ha tenido en sus votaciones pro intereses empresariales que afectan directamente los interés de comunidades Mapuche y que van a favor de grupos económicos que violan Derechos Humanos y que destruyen la naturaleza, anclados a los sectores más conservadores del País. Ejemplo de esto, su apoyo a los intereses de los sectores empresas forestales, agroindustrias y pesqueras.
Se extiende a continuación información de febrero del 2014 que ya daba cuenta de sus comportamientos parlamentarios.
Chile: Las paradojas de Fulvio ¿Para quién opera el senador Rossi?
Fulvio Rossi, senador socialista, pertenece al establishment político de Chile. Médico de la Universidad de Chile, un hijo, actualmente soltero, de 42 años, es una suerte de «joven consentido» de la política nacional.
Siendo Vicepresidente del PS, llegó al senado a los 40 años, apoyado por su padrino polìtico, el cuestionado ex Ministro José Antonio Viera Gallo (autor del decreto 124 que mutila la consulta indígena del Convenio 169 de la OIT).
Con un verbo capaz de explicar lo inexplicable (según magazines), hay poderosas razones para revisar el rol que ha jugado en la Cámara Alta, toda vez que ya ha manifestado su voluntad de postularse como candidato presidencial.
1.- LEY DE PESCA («LEY LONGUEIRA»)
La Ley de Pesca, promovida por el gobierno de Sebastián Piñera, ha sido acusada por la entrega por 20 años renovables (indefinida en la práctica) de los recursos pesqueros de Chile a 7 familias empresariales, profundizando la crisis de la pesca artesanal, privatizando los recursos de Chile, creando una crisis alimentaria, y desconociendo los derechos pesqueros históricos y ancestrales de los pueblos originarios. El proyecto ni siquiera fue consultado como lo dispone el Convenio 169de la OIT y las sentencias del Tribunal Constitucional.
Ante CNN, como miembro de la Comisión de Pesca, Fulvio Rossi, quien votó en favor de la Ley de Pesca, reconoció que el proyecto de ley era «muy malo», pero que los opositores fueron «financiados por las familias pesqueras». Acusó que Ximena Rincón y José Antonio Gómez votaron en contra de la ley de pesca por «sus candidaturas presidenciales». Justifica su voto favorable en virtud de que los peces son ahora «de propiedad del Estado», a pesar de la pobre limitación que significan los 20 años de duración de los derechos de pesca, renovables indefinidamente. Asimismo destacó la creación del IFOP artesanal (bonos de pobreza para los pescadores artesanales ante la falta de cuotas), y leves medidas de sustentabilidad.
El periodista Alejandro Guillier (hoy Senador electo), le preguntó a Rossi en otro medio: «¿se quedan con 85% de los peces en Chile las 7 familias?», a lo que respondió que «las posturas maximalistas nos llevan a votar dando un mero testimonio, a ganar un aplauso facil de la galería». http://www.youtube.com/watch?v=GWyzYfSCC4I
Curiosamente, han habido serias denuncias de sobornos a parlamenarios, en virtud de los cuales la diputada Martha Isasi fue sancionada por la Comisión de Ética, en la cual se sindicó al senador Rossi como uno de los parlamentarios que «camufló» como asesores a Cristián Tapia, de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales (Conapach), organización que dio su apoyo a la Ley Longueira.
Se entiende ahora que el senador huyó de la caleta de pescadores de Arica, el día del fallo de la Haya, pues es uno de los responsables de privatizar los recursos pesqueros y perjudicar la soberanía de Chile.
2.- LEY FORESTAL DE PINOCHET
Igual que la Ley Longueira, el Decreto Ley de Fomento Foresta, creado por Pinochet, y que bonifica los emprendimientos forestales hasta con un 100% de la inversiòn, ha sido cuestionado por sus graves efectos ambientales, sociales y culturales. Las plantaciones forestales, que en la práctica son monocultivos de pino, dejan a los territorios sin agua, matan la biodiversidad (plantas nativas y animales, por la alta acidez de la resina de los pinos), y se encuentran casi exclusivamente en tierras usurpadas al pueblo mapuche y que por su reivindicación, han provocado criminalización y aplicación de la ley antiterrorista.
Fulvio Rossi votó en favor de la extensión por 20 años de esta nefasta ley, sin consulta indígena, ni revisión de los efectos de la misma. De hecho, en su intervención en la sala del senado señaló que votaba a favor por que miles de mapuche habían recibido bonificaciones forestalesde dicha ley. Según esa lógica, los estudiantes no deberían postular a las becas pues hay lucro en la educación. Olvida el senador que por unos bonos, no se pueden renunciar a los derechos humanos de las personas y de los pueblos. Se olvida con ello de su militancia socialista.
3.- LEY MONSANTO:
Esta ley permite la privatizaciòn de las semillas nativas chilenas, campesinas y de los pueblos originarios, vía los denominados «derechos del obtentor vegetal», ya existentes en Chile, pero ahora reforzados como derechos de «super propiedad» por la nueva reforma. Permite la usurpación de biodiversidad que ha sido creada colectivamente por los pueblos. Permite que las empresas suscriban con los campesinos e indígenas a contratos leoninos y abusivos de exclusividad, sometidos a fuertes multas, y cuya exigibilidad se somete a «jueces árbitros», impagables para las contrapartes más débiles. El comercio de semillas protegidas es casi exclusivamente sobre transgénicos resistentes al glisofato y otros poderosos pesticidas.
El día 08 de enero, organizaciones indígenas denunciaron a Contraloría el conflicto de interés del Ministro de Agricultura, Luis Mayol, por tener acciones en COPEVAL, empresa que vende semillas protegidas por derechos del obtentor vegetal, es decir, privatizadas. El mismo día el gobierno le quitó el decreto de urgencia al proyecto de ley, y se anunció que no se tramitaría sino hasta marzo. No obstante, a la semana siguiente, el proyecto apareciò sorpresivamente en tabla, y comenzó a votarse, incluso algunos senadores intervinieron en la sala. Joel González, miembro del Colectivo Socioambiental nueva Tierra, denunció que » A petición del Senador Fluvio Rossi se dio inicio a la discusión legislativa».
El peligro de esto es que los diputados aprobaron la ley, y ante el rechazo de la misma ley por el senado, se forme una Comisión Mixta que acelere su tramitación sin consulta indígena ni deliberación ciudadana.
Los asistentes a la última sesión del congreso, en enero de 2014 aún recuerdan que gritaba al final de la misma «¿Y vamos a votar la Ley Monsanto? , ¿Y la ley Monsanto?».
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Como puede verse, el desempeño del senador Rossi ha sido nefasto en este tipo de materias. Ha jugado el rol del entreguista y vulnerador de derechos humanos junto a otros parlamentarios. Ha dado la espalda a intereses colectivos. Dan lo mismo sus cuestionadas relaciones con la farándula, lo que importan son sus votos. Viene constantemente hablando del aborto, de la maruhuana, de los derechos a la diversidad sexual. Pero eso no lo disculpa ni logra encubrir el grave daño que ha hecho a bienes e intereses amplios, de Chile, a la ciudadanía, y a los pueblos originarios al estar apoyando iniciativas nefastas como las señaladas. ¿Va a continuar por la misma senda?
